Por qué a las mujeres con diagnóstico de cáncer a menudo se les recomienda únicamente la maternidad subrogada

Un diagnóstico oncológico es una prueba no solo para la salud, sino también para el sueño de una mujer de convertirse en madre. La medicina moderna permite que muchas pacientes, después del tratamiento, regresen a una vida plena; sin embargo, cuando se trata del deseo de tener un hijo, con frecuencia existen limitaciones serias. En muchos casos, la maternidad subrogada se convierte en el único camino seguro hacia la maternidad.

Por qué después del cáncer el embarazo natural suele ser imposible

Las razones pueden variar, pero en la mayoría de los casos están relacionadas con las consecuencias del tratamiento:

Extirpación del útero (histerectomía)
En algunos tipos de cáncer (cáncer de cuello uterino, cáncer de endometrio), el tratamiento implica la extirpación total del útero, lo que hace físicamente imposible llevar un embarazo.

Extirpación de los ovarios (oforectomía)
En el cáncer de ovario o con un alto riesgo de metástasis, se extirpan los ovarios. Si la mujer conservó sus óvulos antes de la cirugía, se pueden obtener embriones mediante fecundación in vitro y transferirlos a una madre subrogada.

Daño a la función reproductiva por quimioterapia o radioterapia
El tratamiento agresivo a menudo daña el endometrio o destruye por completo la función ovulatoria. Incluso si el embarazo fuera posible en teoría, el alto riesgo de aborto espontáneo o complicaciones lo hace peligroso.

Contraindicaciones médicas para el embarazo
En algunas pacientes, incluso después de la recuperación, los médicos prohíben llevar un embarazo debido al riesgo de recaída, empeoramiento de la enfermedad o complicaciones graves que amenazan la vida.

Qué tipos de cáncer requieren con mayor frecuencia maternidad subrogada

No todo diagnóstico oncológico significa automáticamente la imposibilidad de un embarazo, pero hay algunos casos en los que la maternidad subrogada es la única opción:

  • Cáncer de cuello uterino
    A menudo tratado mediante la extirpación del útero y el cuello, a veces junto con los anexos. 
  • Cáncer de endometrio (cáncer del cuerpo uterino)
    En la mayoría de los casos requiere histerectomía total. 
  • Cáncer de ovario
    Implica la extirpación de ambos ovarios y las trompas de Falopio. 
  • Cáncer de mama con necesidad de terapia hormonal prolongada
    Durante y después del tratamiento, el embarazo puede estimular el crecimiento de células cancerígenas debido a los cambios hormonales, por lo que está prohibido. 
  • Tumores malignos poco frecuentes de la pelvis
    Por ejemplo, sarcomas del útero o de la vagina que requieren cirugía radical. 

El papel de la preservación de la fertilidad antes de iniciar el tratamiento

Si el diagnóstico oncológico se detecta en una etapa temprana, la mujer puede conservar la posibilidad de tener un hijo genético mediante:

  • Criopreservación de óvulos o embriones antes de comenzar el tratamiento. 
  • Congelación de tejido ovárico (tecnología experimental pero prometedora). 

Estos materiales biológicos pueden utilizarse en un programa de fecundación in vitro con madre subrogada después de finalizar la terapia y alcanzar un período estable de remisión.

Por qué la maternidad subrogada es más segura para las pacientes oncológicas

  • Ausencia de la carga física del embarazo
    Minimiza el riesgo de recaída o empeoramiento de la enfermedad. 
  • Posibilidad de ser madre incluso sin útero
    Si se han conservado óvulos o se dispone de material donado. 
  • Rehabilitación emocional
    Después de un tratamiento difícil, el nacimiento de un hijo a través de la maternidad subrogada ayuda a recuperar el sentido de plenitud en la vida. 

Conclusión

Para las mujeres que han superado el cáncer y no pueden llevar un embarazo por sí mismas, la maternidad subrogada no es solo un procedimiento médico, sino una oportunidad para ejercer su derecho a la maternidad. Ofrece la posibilidad de tener un hijo genéticamente propio, preservando al mismo tiempo la vida y la salud de la madre.